Ha sido una experiencia inmejorable.
el lugar es bellísimo, decorado con muchísimo gusto.
Por no hablar de los alrededores...estar tumbados en el jardín con vistas a la sierra fué todo un lujo.
Que decir de Anita? Nuestra anfitriona no pudo ser más amable y cercana.
Compartir con ella los desayunos fué super agradable.
También destacar la discreción y el cariño de la chica encargada de la limpieza, un amor.
En definitiva, no tenemos ningún pero que ponerle a aalcachucho, sin duda será nuestro lugar cuando volvamos a Madrid.