Cuando llegamos nos dimos cuenta que la casa es tal cual sale en las fotos. Las habitaciones muy bien, con sus armarios empotrados grandes, ropa de cama prácticamente nueva o nueva, las toallas (de sobra) sobre la cama, 3 cuartos de baño preciosos, uno de ellos en el dormitorio principal grande con plato de ducha fenomenal, el dormitorio principal con cama de matrimonio enorme, de 1,50 m, la cocina con todos los electrodomésticos (no faltaba de nada), utensilios y vajilla nuevas, sin echar de menos nada, el frigorífico de doble puerta que saca cubitos de hielo (no es necesario comprar), etc., y lo mejor, la parte de abajo con una pedazo de barra con grifo de cerveza, nevera de barra, otro baño grande con plato de ducha y, saliendo, la barbacoa con jardín, una pasada, además con leña.
Así que en la casa, fenomenal y, luego por Navaluenga también, hay rutas a pie, en bici, se puede montar a caballo, etc. Hemos pasado un fin de semana que, muy probable, se repita, genial, y el entorno es precioso.
Julio, el dueño, nos atendió estupendamente, con todas las facilidades y buenos detalles, además de estar todo superlimpio y recogido. No tengo más que buenas palabras. Así se disfruta más y mejor. Buena gestión, sí señor.
*** Por cierto, la TV de LED LG de 50" o más, todo un puntazo.
Resumen, un buen fin de semana para no olvidar y deseando volver...