La habitación impecable, espaciosa, el aire siempre funcionó genial, me encantó el concepto tipo pequeño apartamento porque nos permitía estar en la sala o el balcón si no queríamos salir de nuestra habitación.
El servicio 10/10
Nuestro concierge Raphy atento, detallista siempre dispuesto ayudar sin duda hizo de nuestra estadía de aniversario una experiencia extraordinaria.
El chef de pizza Zorrilla muy amable y servicial, nos hizo una deliciosa pizza de camarones personalizadas que la disfrutamos al máximo.
El camarero de la piscina muy atento y amable, lamento no recordar su nombre pero siempre estuvo pendiente de nuestros traguitos.
Ricardo el camarero de la playa, súper servicial nos buscó la forma de siempre tenernos cómodos.
Jeisson el camarero del restaurant Hibachi 10/10 nos antojamos de café y ya la estación estaba abierta y fue y nos preparó un delicioso café.
El bartender de la discoteca voltaje amable, atento y siempre dispuesto no había paloma y me creo un trago parecido que estaba delicioso no dijo que no nos buscó la vuelta.
El Zel es un hotel de experiencia la comida deliciosa los taquitos del restaurant griego fenomenal y que decir de la comida de la playa, se ocupan mucho de los detalles, realmente es un viaje de descanso, desconexión y buena comida. Cada rincón es una experiencia única y agradable 100/100, sin duda volveríamos.