El hotel en sí no está mal, el staff es amable y la zona de la piscina es muy agradable.
Desgraciadamente según nos explicaron amablemente, tiene una política por la cual a partir del check out "ya no eres cliente del hotel", y no nos permitieron pasar unas horas más en la piscina hasta la salida de nuestro tren por la tarde, aunque paradójicamente sí dejar dos mochilas en consigna.
La verdad nunca me había pasado en ningún otro hotel y me ha dejado un poco mal sabor de boca. Una lástima