Guest House Kiko fue una agradable sorpresa durante nuestra estancia en Mljet! La habitación twin económica era acogedora y estaba bien equipada, y nos encantó el aire acondicionado, especialmente después de un largo día explorando el parque nacional cercano, La ubicación es perfecta: a solo un corto paseo del impresionante Parque Nacional de Mljet, donde pasamos horas disfrutando de la belleza natural y visitando el monasterio en el Gran Lago, Los anfitriones fueron increíblemente amables y ofrecieron excelentes consejos sobre las atracciones locales como la Cueva de Odiseo y la Bodega Matusko, En general, una gran relación calidad-precio para una escapada tranquila!