Reservamos 24 horas antes. Llegamos a las 15.30 y desde esa hora hasta las 19.30 que nos retiramos a cenar, tenían música electrónica que incomodaban estar tranquilos en la habitación premium que arrendamos junto frente al mar. Pedimos que bajaran la música, y dijeron que la podían bajar en la terraza, pero durante esas 4 horas tuvimos que soportar los 'bumbum' de los bajos de la música electrónica. De espanto! Habíamos contratado por dos noches, tuvimos que salir al día siguiente y por supuesto nos cobraron las dos noches. Dijeron que había que anular con 15 días de anticipación. Pero si habiamos contratado hace 24 horas! Cuando le volvimos a mencionar el problema a la encargada de turno, nos dijo que debíamos haber preguntado antes si había música molesta. Pésimo.